¿Para qué tienes que vivir? ¿Cuál es el propósito de tu vida?

Escribe una historia sobre ti teniendo o haciendo o siendo lo que sea que deseas o para lo que estás dedicando tu tiempo.

Completa todos los detalles que desees sobre las cosas que te llenan de pasión y entusiasmo.

Deja que tu mente se vuelva creativa y ¡diviértete!

Visualización:

Luego, imagínate viviendo la vida que acabas de crear en el ejercicio anterior. ¿Cómo se siente esta vida ideal? ¿Qué aspecto tienes? ¿Qué sientes, ves, saboreas, tocas o escuchas? Imagina tus relaciones ¿Con quién te estás asociando? Relájate y respira tu nueva libertad y felicidad.

¡Que los ángeles acompañen tu camino!