Todo cambia, nada permanece
Todo cambia, nada permanece. Esta es la ley. Sin embargo a veces sentimos que nuestra vida no obedeciera a esta ley. A veces sentimos que todo se repite: atraemos el mismo tipo de personas en nuestras relaciones, continuamos con los mismos problemas familiares o económicos, sufrimos las mismas oscilaciones de amor y odio, de realización y fracaso, de alegría y depresión… ¿Cómo salir de este círculo vicioso y cambiar realmente? Querer cambiar no es en absoluto la clave de este cambio. La salida de la repetición no se produce recorriendo la circunferencia del círculo porque así se regresa siempre al mismo punto de partida. La salida sólo pasa por el centro, mantenerse en el centro de ti mismo y ahí ver cuál es el sentido de esta repetición. No es cuestión de querer salir de la situación sino de aprender lo que debes aprender de la situación. En general, lo que nos va a transformar no es lo que imaginamos que nos va a transformar. Es justamente lo que más pánico nos da. Nos da pánico porque cuando nos transforme, el ego no podrá ser el que era. Nuestro inconsciente atrae permanentemente las situaciones que nos llevan a crecer y éstas se repetirán hasta que extraigamos todo el aprendizaje de ellas y, entonces, como ya no las necesitemos para crecer, ya no se repiten y el cambio llega. Tomamos consciencia, cambiamos interiormente y el cambio también sucede en el exterior.
Que los ángeles acompalen tu camino.
me encanta ese comentario porq yo he pasado por eso, hasta q decidi no reaccionar como siempre, sino q escuchar, esperar y luego contestar serenamente, sin presiones, ni pensamientos agresivos (q son los primeros en llegarte a la mente) la verdad me dio buenos resultados . gracias por recordarnos como debemos de aprender de nuestras vivencias.
Me ha sucedido que cuando acepto alguna situaciòn o alguna persona, inmediatamente, como por arte de magia, todo cambia.
He comprendido que lo mejor es aceptar, fluir y soltar…
Gracias…