Las palabras que usas para describirte afectan profundamente el sentido de amor por ti mismo y tu valor propio. Estas palabras incluyen lo que piensas, dices, escribes y hasta las bromas que haces respecto a ti.

Tú eres la persona que te cuida, Así como una madre o un padre crían a un bebé, así también tienes responsabilidades y obligaciones hacia tu propio ser. Tus deberes parentales incluyen hablarte con amor y gentileza, como si tú fueras tu propio bebé.

Hoy, usa solamente terminología hermosa para describirte. Esto no quiere decir que eres presumido, sencillamente estás reflejando tu naturaleza divina. Cuando usas palabras hermosas, hablas con la verdad. Esto eleva al máximo tu energía, al lugar en donde ocurren los milagros y las manifestaciones instantáneas.

 Pensamiento del día:

“Pienso en mí en términos amorosos, y me expreso muy bien de mí mismo. Valoro mi Divinidad y vivo al máximo mi verdadero potencial. Disfruto la sensación de paz que se origina cuando me honro y me respeto.”

Que los ángeles acompañen tu camino.