Una manera de disfrutar el mes del amor es abrirme a recibir el amor que todos los que me rodean están dispuestos a darme. Muchas veces, la vida me sonríe y comienzo a recibir todo aquello que jamás soñé. Teniendo dificultades en la vida, en un mágico momento, mi vida cambia y la abundancia desbordante entra en ella.

¿Por qué me resisto entonces a recibir? ¿Por qué si yo pedí abundancia y me llega me niego a recibirla?

Desde hoy acepto la entrada del amor en mi vida en forma de abundancia en todo sentido y dejo que fluya recibiendo todo lo que me llega y agradeciendo que mis peticiones sean cumplidas y sobrepasadas. ¡Dios es abundancia! Pedí abundancia… llega a mí la abundancia sobrepasando mis expectativas… recibo todo con amor. Así será mi vida de ahora en adelante: el amor desbordante excediendo mis expectativas.

Que los ángeles acompañen tu camino.