Saltar al contenido.

Me aferro a la alegría de vivir

A veces, por mucho empeño que pongamos a la vida, se vale sentirse derrotado… sólo por unos instantes… no más…

Tomo una respiración profunda… cierro mis ojos… tomo mis triques y me levanto de nuevo con una brillante sonrisa.

Hoy es el único día que tengo para ser feliz. Solamente dispongo de estos momentos, en esta circunstancia (la que sea que vivo) para sonreirle a la vida y decir de nuevo: «¡Soy feliz! ¡HOY DECIDO VIVIR CON ALEGRÍA!»

Que los ángeles acompañen tu camino.

3 Comentarios »