El amor es contagioso
Cuando comparto el amor, me regresa multiplicado. Es como una epidemia. Quien se contagia no puede resistir las ganas de amar a los que lo rodean. Y entonces esos que reciben un gesto amoroso, lo contraen para sí mismos y también para quien más aman.
¡Hagamos del amor una epidemia mundial! Contagiémonos todos del deseo de amar incondicionalmente al que está próximo a nosotros, es decir, el próximo es el «prójimo». ¡Qué bendición aceptar al que está al lado mío tal como es y saber que, así como es, es perfecto a los ojos del Creador de Todo!… y a nuestros ojos… también. Así, justo así, amémoslo.
¡Que los ángeles acompañen tu camino!
Que dificil se nos hace no juzgar quando tendria que ser justo lo contrario.
Tener la tranquilidad que todo es justo sea como sea y sea lo que sea