Conforme trabajamos para limpiar nuestros bloqueos y permitimos a la elevada energía del cielo y a los ángeles entrar en nuestras vidas, encontramos algunas situaciones “normales” que nos causan cierta incomodidad así como ciertos alimentos, música, televisión o conversaciones que nos hacen sentir inquietos y algunas ocasiones nos enferman.

Es por eso que los ángeles nos han enseñado a protegernos. El poner escudos o protecciones es un proceso en el que se llama a un ángel (o varios ángeles) y se les pide que nos rodee con el color y la vibración de su energía. Muchos arcángeles se especializan en ayudarnos a protegernos de las bajas energías y nos ofrecen protección.

Para aquéllos que no se han atrevido a utilizar el magnífico poder de los ángeles para bloquear y eliminar las energías inferiores, esto puede hacer un mundo de diferencia en las actividades del día a día de sus vidas.

¡Que los ángeles acompañen tu camino!