Me comunico verazmente y purifico mi habla

Nos enseñan a comunicarnos desde pequeños, pero tal vez no es la mejor manera.
Los años pasan y nuestra comunicación tiene fallas, ruido, rupturas; nos escondemos en el sarcasmo y la ironía para evitar la verdadera confrontación cuando decir las cosas de forma clara y directa haría nuestra vida mucho más fácil.