En la Infinitud de la Vida, todo es perfecto, absoluto y completo.

El ciclo de la Vida también es perfecto, absoluto y completo.

Hay un tiempo de comienzo, un tiempo de crecimiento, un tiempo de estar, un tiempo de marchitarse o agotarse, y un tiempo de irse.

Todos estos tiempos son parte de la perfección de la Vida.

Lo sentimos como algo normal y natural y aceptamos el ciclo y sus ritmos. Fluimos y nos movemos en ellos sin resistencia.

Al final de esta vida, sólo hacemos una transición de lo físico a lo no físico. Seguimos existiendo. Somos seres inmortales.

¡Que los ángeles acompañen tu camino!