Elijo que mi vida sea maravillosa

Tu vida puede ser tan maravillosa o tan horrible como permitas que sea.
Todo depende de los pensamientos que practiques.
Y ahí radica la base del éxito de cualquiera: ¿Cuánto practico los pensamientos que me producen alegría y cuánto practico los pensamientos que me causan dolor?
Nada importa más que tu alineación personal en relación a tus metas o deseos individuales, en eso es donde debes enfocarte.