¿Conoces el dicho aquel que dice «La risa es la mejor medicina»? En verdad creo que esto es real. Me encanta reír. La risa es contagiosa y el humor amoroso puede ser muy sanador. Cuando la risa se comparte, crea un vínculo con esas personas. Aumenta la felicidad de los que nos rodean. La risa crea una conexión especial muy amorosa entre las personas que la disfrutan. La risa es una poderosa medicina para la mente, el cuerpo y el alma. El buen humor y la risa fortalecen el sistema inmune, aumentan la energía vital, disminuyen el dolor y protegen de los efectos dañinos del estrés.

Lo mejor de la risa es que no tiene precio. Cuando reímos, nos sentimos bien y esos agradables sentimientos se quedan con nosotros aún cuando hemos dejado de reír. El buen humor nos mantiene en una perspectiva positiva de la vida y nos ayuda a salir adelante en las dificultades. Cuando reímos hay un incremento en el flujo sanguíneo permitiendo que nuestros músculos se oxigenen mejor. Esto estimula nuestro corazón y se incrementa la generación de endorfinas las cuales nos ayudan a sentirnos más relajados tanto física como emocionalmente.

Así que, cuando te sientas estresado, mira un video chistoso o pide que te cuenten un chiste… y ¡RÍE!

¡Que los ángeles acompañen tu camino!